Consultar con el médico debe ser parte de las actividades anuales aunque no se presente síntoma alguno
Protagonistas de nuestros síntomas
Muchas veces cuando nos sentimos mal solemos contar en una charla entre amigos aquello que nos aqueja físicamente. Así nos convertimos en los mejores narradores de historias. Adjetivamos en exceso y graficamos cada dolencia -aunque sea pequeña- como si fuese un volcán en erupción.
Sin embargo, ¿por qué en lugar de rumiar no pedimos una cita con el médico? Curiosamente, y a colación de esto, el médico y científico español Santiago Ramón y Cajal dijo algo muy apropiado y que nos complace citar y compartirles:
Sólo el médico y el dramaturgo gozan del raro privilegio de cobrar las desazones que nos dan.
Y es cierto lo que propone porque pareciera que lo que se cuenta es similar al libreto de una obra de teatro en la que nosotros mismos la escribimos.
Tal vez el relato tiene un diagnóstico, o quizá no sea nada y no tenga un nombre, pero… ¡dejemos que hablen los eruditos!
Cada quien atiende lo que mejor sabe hacer y en el caso de uno como paciente debe acudir al médico, tal es el papel que nos corresponde. Que sea el profesional quien ponga la palabra precisa a la historia que nos tiene como protagonistas.
Aquí planteamos cuestiones que no están aisladas porque forman parte de lo que podríamos llamar ecosistema:
- Síntoma.
- Consulta médica.
- Chequeo de rutina.
- Estudios.
- Diagnóstico.
- Tratamiento.
Los beneficios de un diagnóstico a tiempo
¿Qué propone Galeno? desde hace tiempo intenta concientizar sobre la importancia de hacer chequeos anuales o bianuales. Un diagnóstico a tiempo puede ayudar a cambiar vidas.
Ahora les detallamos los factores positivos que intervienen cuando ya hay un diagnóstico:
- Reduce la mortalidad por determinadas enfermedades que se pueden detectar en estadios precoces.
- Mayores posibilidades de éxito en el tratamiento.
- Disminuyen las secuelas de la enfermedad…
- Menores complicaciones y secuelas del tratamiento.
- Casos en los que se consigue la total recuperación de la salud.
El médico y el paciente
La figura del médico cumple un papel fundamental durante el proceso que transita el paciente. Debe realzarse el vínculo desde el acompañamiento mutuo y como una cuestión cuasi tácita la empatía tiene que anidar en la relación. Esta idea la potenciamos porque las respuestas a cada interrogante que se va presentando las puede dar tan solo el profesional.